Una adolescente quiso experimentar y decidió colocarse ella misma un juego de uñas postizas, pero el pegamento le causó una grave infección y tuvieron que amputarle la punta de uno de sus dedos.
Sarah Greenaway, de 17 años de edad, tuvo que ser llevada al hospital tras contraer una grave infección a causa del pegamento que utilizó para colocarse uñas postizas.
La joven entró en un estado de agonía y fue traslada de emergencia al Newport’s Royal Gwent Hospital con el dedo índice de su mano derecha con un color desagradable, totalmente verde; por lo que los médicos se vieron obligados a cortarle la parte superior de éste, con el fin de salvar el resto de la mano.
“Fue muy aterrador – Yo lloraba de dolor. Fue horrible”, declaró la joven. “En ese entonces los médicos no sabían si habían salvado mi dedo. Dijeron que todavía habían posibilidades de que tuvieran que amputarlo por completo”, agregó.
Tras lo sucedido, Sarah está manejando la posibilidad de emprender acciones legales contra los fabricantes del pegamento.“No puedo entender cómo mi dedo se infectó de esta manera. Puede que haya sido un mal lote de pegamento y estamos pensando en tomar acciones legales”, dijo la chica.
Por fortuna, ahora la joven se va recuperando poco a poco, y actualmente asiste a fisioterapia para ayudar a recuperar la funcionalidad de su dedo.
“Lo único que quería era que mis uñas se vean bien”, dijo la joven tras asegurar que no volverá a ponerse uñas postizas nunca más.
“Lo único que quería era que mis uñas se vean bien”, dijo la joven tras asegurar que no volverá a ponerse uñas postizas nunca más.
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